7 razones para viajar por Asia
Desde las montañas de colores de China hasta las frenéticas calles de Vietnam, Asia es un continente para enriquecer el conocimiento, irse de aventuras o bien para hallar la espiritualidad. Todas estas diversas facetas son las que han cautivado y desconcertado a viajeros durante siglos. Nuestra experiencia por Asia no ha sido distinta.
Cuando las personas piensan en “Asia”, principalmente se vienen a la mente países como China, Japón y Corea. La realidad es que Asia es una región que va desde Estambul hasta Indonesia, ¡una vasta porción del mundo! Pero para que no nos perdamos en su inagotable extensión, este post hará referencia a la parte oriental de Asia.
1. Parecido pero diferente
Los asiáticos –de oriente– poseen culturas, idiomas e historia únicos. Desde lejos, pueden parecer similares, pero la realidad es que los países de Asia son muy diferentes entre sí. La buena noticia es que si viajas, rápidamente aprenderás esto por tu cuenta, pudiendo llegar incluso a distinguir en qué se parece y diferencia cada lugar y sus gentes.
2. Civilizaciones antiguas
Este continente ha contribuido a la historia global con un completo elenco de villanos y héroes. La mayoría de los logros significativos del mundo moderno tuvieron su infancia en Asia. Las rutas comerciales históricas unieron regiones lejanas a medida que los imperios en expansión compitieron por intercambiar bienes e ideas en todo el continente de Eurasia y Oceanía
Las ambiciosas civilizaciones de Asia finalmente dieron origen a algunas de las ideas más revolucionarias y tecnologías más importantes del mundo. Las maravillas antiguas y los espacios sagrados abundan en todo el continente, desde la Gran Muralla China y los templos de Angkor hasta maravillas menos conocidas de Myanmar y Laos.
3. Su gente
Quizás la parte más memorable de una visita a esta parte del mundo sea su gente sonriente, abierta y amable. A pesar de que muchos de estos países han pasado por momentos difíciles en su pasado reciente, parece haber un sentimiento optimista en casi cada lugar. La hospitalidad está asegurada, y si encima aprendes algo del idioma local antes de llegar, ¡prepárate para hacerte muchos amigos!
4. Comida para todos los gustos
¿Existe algún lugar para comer tan diverso y rico como Asia? El continente ha exportado sus cocinas por las que cada país es reconocido en mundo: los currys candentes de Malasia, las jugosas albóndigas de China, los tazones de sopa humeantes de Vietnam y los platos colmados de fideos como el pàt tai tailandés (pad Thai).
Comer allí puede ser tanto un asunto sabroso como caótico. En ocasiones, los tenedores se dejan a favor de los dedos o palillos y la diversidad de sabores que se encuentra en cada plato se disfruta con un gusto incomparable. Ya sea que se decida por un restaurant con estrella Michelin en Singapur o bien en un banquito de plástico en una calle de Bangkok, los ávidos comedores-viajeros nunca se aburrirán de la originalidad de las cocinas asiáticas.
5. Vastos paisajes
Desde las costas sublimes hasta las montañas cubiertas de nieve, el majestuoso río Mekong y la selva con abundante vida silvestre, los paisajes asiáticos tienen una profundidad y vitalidad que cautiva y encanta. Inmensas extensiones de desierto fluyen desde montañas inhóspitas, que a su vez dan paso a bosques aparentemente impenetrables.
En una tierra donde los tigres todavía vagan libres (aunque lejos de los turistas), la naturaleza sigue siendo la fuerza motriz en la vida de muchas personas. Prácticamente todos los climas del mundo están representados aquí.
6. Las cosas cambian rápidamente
En todo el mundo, pero particularmente en Asia, las cosas están cambiando rápidamente, día tras día. Debido a la explosión demográfica, la afluencia de nuevas tecnologías y sus gobiernos abiertos económicamente al mundo, la cultura y el paisaje físico de cada país asiático está en constante transición. Esto puede ser para bien o para mal, pero una cosa es segura: el país de Asia que visites ahora será muy diferente al que veas dentro de diez años.
7. Aprender es inevitable
Viajar no es solo vacaciones, es parte de nuestra educación. Al alejarse de los lugares de viaje más tradicionales, la duda por lo desconocido es capaz de intimidar a cualquier viajero. Pero la realidad es que viajar a lugares tan distintos a nuestra casa ampliará tus horizontes (por cliché que eso suene).
Embárquese en una aventura con nosotros por Asia y con toda seguridad volverás con mucho que contar.